Las pinturas acrílicas son unas de las más modernas que existen. Su existencia deriva de la necesidad de un tipo de pintura de calidad, con un medio disolvente limpio y rápido de secar. Los pigmentos de que constan son de gran pureza y permiten obtener todo tipo de colores, se mezclan con gran facilidad y el resultado cromático es tan vistoso como el de la pintura al óleo, aunque mate. Pero siempre puede aplicarse algún tipo de barniz cuando están secas para añadirles brillo.

Una vez aclarado esto sobre la pintura acrílica, vamos con los cuatro procedimientos que queremos enseñarte hoy:

  1. Manchado acuoso: Las pinturas acrílicas pueden trabajarse por empastes, como el óleo, o aguada, como la acuarela. Se aplican como ésta porque sus pigmentos son puros y potentes; aunque con una buena dosis de agua, la pintura es capaz de teñir el papel; no es necesario recurrir al empaste para lograr oscuros intensos o colores vivos. Cuanto más líquidas se aplican las pinturas acrílicas, más rápido es su secado. En esta ocasión se mancha mediante veladuras, que se producen cuando se interviene con un color muy transparente que deja ver la capa de color inferior.
  2. El secado y las nuevas capas: Cuanto más líquido sea dado a las pinturas acrílicas, más rápido será su secado; ello permitirá trabajar por capas de las misma manera que con acuarelas, lo cual obligará a esperar a que la capa anterior se haya secado antes de dar una nueva, para evitar que se produzcan fundidos. Sobre una capa seca se puede matizar el color interviniendo con otro o con el mismo para intensificarlo.
  3. Rapidez en la mezcla: El hecho de esperar a que la pintura se seque es imprescindible para aplicar capas y lograr veladuras. Si se requiere un tono puro independiente de los anteriores, deberá esperarse al secado total de las primeras capas; si no se espera el tiempo suficiente, el color anterior ensuciará el siguiente. Los tonos que se vayan a fundir deberán aplicarse en húmedo y podrá lograrse una sensación tan lisa y homogénea como con el óleo, si bien el trabajo será más rápido, ya que el tiempo de secado es mucho más rápido.
  4. Superposición sobre seco: Para evitar fundidos, siempre debe esperarse a que una capa se haya secado antes de aplicar otra sobre ella. Una vez que una capa está seca, se puede matizar el color interviniendo con otro o con el mismo para intensificarlo. Pueden utilizarse muchas capas, no tiene por qué aplicarse una pintura plana; en esta técnica, aguada o empaste se combinan con gran facilidad.

Hasta aquí estos 4 procedimientos con pintura acrílica que debes conocer. Recuerda que siempre estaremos encantados de recibirte en nuestros cursos de dibujo y pintura en Madrid.

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